Durante las dos últimas décadas, el sector de la aviación privada ha sufrido una excesiva fragmentación que, si bien ha ofrecido a los consumidores nuevas opciones, también ha causado confusión con tantas opciones nuevas como el auge de las aplicaciones de aviación de negocios y las opciones de vuelos compartidos.
La reciente actividad de consolidación es sólo la última de una serie de consolidaciones del sector que hemos visto. Seguimos asistiendo a la consolidación de los fabricantes de aeronaves y al crecimiento de los megaoperadores de base fija. También la hemos visto dentro de los operadores de aeronaves, por lo que la progresión natural se extiende a los corredores de chárter de aeronaves.
La consolidación tiene muchas ventajas, entre las que destaca el hecho de que fortalece a los actores fuertes y acelera el éxito de las empresas nuevas e innovadoras. La consolidación suele poner de manifiesto las ineficiencias. A pesar de ser grandes, algunas empresas no han podido crecer orgánicamente, por lo que la consolidación permite un crecimiento continuo en lo que ahora es una industria madura.
Estas empresas fusionadas, si consiguen integrar con éxito sus culturas, quizá respondan a la preferencia de los pasajeros por unos servicios coherentes. Pero las empresas de aviación de negocios deben tener cuidado de no caer en la trampa que cayeron las aerolíneas cuando se consolidó el sector. Prometieron un servicio sin fisuras, pero conseguirlo ha sido frustrantemente esquivo para los pasajeros, especialmente en los mercados globales.
Las aerolíneas también atravesaron un periodo de disrupción que diluyó la experiencia del pasajero a medida que seguían integrándose. La coherencia que una vez tuvieron se perdió al intentar crear un todo a partir de mitades dispares. Se trata de una consecuencia natural de la consolidación, pero es el cliente quien paga mientras se ponen las pilas.
Es probable que la reciente tendencia a la consolidación en la aviación privada beneficie a los consumidores de este sector al reducir los costes, ya que las empresas se combinan para lograr las economías de escala que han hecho tan exitosas a otras industrias. La consolidación también proporciona a las empresas un alcance global y flotas diversificadas, de modo que, independientemente de dónde tenga usted necesidades de viaje, dispondrá de una ventanilla única para satisfacerlas.
A pesar de estas ventajas, no debemos perder de vista lo que las empresas independientes pueden ofrecer al cliente exigente. Estas empresas son cada vez más creativas, rápidas y flexibles a la hora de satisfacer las necesidades del cliente. Muchas están mejorando su juego, creando asociaciones que les dan el alcance global de estos gigantes de la industria. También están ideando experiencias personalizadas que ofrecen detalles imprevistos pero deliciosos que los clientes ni siquiera saben que están disponibles.
La consolidación del sector es un arma de doble filo para los consumidores atrapados en las consecuencias de toda esta actividad de fusiones y adquisiciones, lo que convierte a las empresas independientes en una solución a la que recurrir en los próximos años.